Durante
su vida, Golda Meir supo de luchas y de victorias. Como Primera Ministra de
Israel, experimentó muchos
episodios conflictivos y de fracaso, como así también el gozo esporádico de
éxitos y triunfos en la vida del incipiente Estado de Israel. Ella dijo acerca
del gozo y la tristeza: «Los que no saben cómo llorar con todo el corazón,
tampoco saben cómo reír».
El apóstol Pablo nos llamó a vivir una vida de
llanto y también de gozo, pero con un giro inesperado. En Romanos 12:15, nos
desafió a mirar más allá de nuestras circunstancias para ver las necesidades de
los demás. Dijo: «Gozaos con los que se gozan; llorad con los que lloran».
Si solo nos regocijamos en nuestras victorias
personales, perdemos de vista lo maravilloso que es celebrar el poder de Dios,
el cual desea llevar a cabo Sus propósitos en y a través de otras personas
también. Si únicamente nos lamentamos de nuestras pérdidas, desperdiciamos la
oportunidad de «estar allí», para demostrarles nuestra compasión a aquellos que
sufren.
La vida está llena de situaciones de gozo y tristeza extremos, de victorias y derrotas, pero se nos ha concedido el privilegio de participar de esos momentos en la vida de otras personas, para ver la gracia de Dios en acción. ¡No te lo pierdas!
Ocuparse de las necesidades de los demás honra a Dios. (RBC)