¿Puede está pregunta aplicarse también a las
relaciones interpersonales? Por ejemplo, si alguien se ha metido en problemas,
¿«lo amarramos a una estaca» para rescatarlo o dejamos que «eche raíces
profundas» por sí solo mientras enfrenta las consecuencias de sus decisiones?
Sin duda, depende de lo que parezca mejor para su bienestar espiritual a largo
plazo. ¿Qué hace el amor y cuándo lo hace? Proverbios 19 ofrece perspectivas
opuestas: debemos apiadarnos y ayudar (v. 17 lbla), pero también es peligroso
rescatar a otro porque tal vez haya que hacerlo otra vez
(v. 19 lbla). Brindar la ayuda correcta exige una sabiduría superior
a la nuestra.
Dios no nos ha dejado librados al azar, sino
que nos dará sabiduría cuando se la pidamos. Y en la medida en que nos apoyemos
en el Señor, nos arraigaremos más profundamente en Él.
La sabiduría
verdadera es mirar al mundo desde la perspectiva de Dios. (RBC)